Mar 16 de May del 2017
Pensar en obras y reformas en casa nos sugiere una tremenda pesadilla!!Empresas informales que se salen de presupuestos y nunca cumplen los plazos!!!!. Sin embargo, daremos unas pautas adecuadas en base a la experiencia que nos hará tener la casa deseada sin arruinarnos y sin volvernos locos.
En segunda posición, dibujar o esbozar una nueva distribución. Cuando ya tenemos claro lo qué necesitamos, podemos buscar una nueva distribución con respecto a los espacios. Hay aplicaciones gratuitas en internet con las que podemos configurar la reforma.
Quizás es el momento de llamar a un profesional para que nos aconseje y asesore en el proceso. Ellos tienen más ideas y además saben los mínimos legales de espacios, etc.
En tercer lugar, cuánto nos van a costar las obras. Aquí hay que plantearse varias opciones de distribución haciendo un estudio de sus costes a la hora de ejecutar las obras. Quizás sea el momento de contactar con un técnico. El nos va a ayudar a diseñar la vivienda conforme a nuestras necesidades y con el mayor aprovechamiento del espacio y al mismo tiempo controla perfectamente los costes de una obra. A mayores, nos dice si nos adaptamos a la legislación vigente y si es posible la realización de distintas acciones para las acometidas de diversas instalaciones. Cuáles son las licencias que tenemos que pedir y si se debe comunicar la reforma a los vecinos.
En este momento del proceso, sabremos a qué ideas o propuestas tenemos que decir que no o que nuevos enfoques mejoran nuestra vivienda sin salirnos en ningún momento del presupuesto con el que contamos.
Uno de los errores más comunes es el de pedir muchos presupuestos, con tres o cuatro como mucho tiene que ser suficiente. Aquí lo más importante es que todos sigan el mismo criterio, que tengan las mismas mediciones y sobre todo lo más importante, la misma memoria de calidades. Esta es la única forma de que para nuestra reforma tengamos presupuestos homogéneos y comparables entre sí.
