Lun 04 de Ene del 2016
Solo 131 de 292 inmuebles anteriores a 1943 habían presentado ayer su certificado
Una de las novedades que trajo este 2015 a la regulación urbanística en Pontevedra fue la «ordenanza reguladora do informe de avaliación dos edificios», que entró en vigor el pasado mes de abril. Se trata de una normativa municipal que obliga a los propietarios de inmuebles con más de 50 años de antigüedad a presentar un certificado sobre las condiciones de seguridad de los edificios: la Inspección Técnica de Edificios (ITE), popularmente rebautizada como ITV de edificios. El informe ha de incluir datos referidos al estado de conservación de cubiertas y terrazas, fachadas, medianeras, cimentación e instalaciones de antenas, ascensores, electricidad, gas o fontanería. Asimismo, los propietarios tienen la obligación de presentar sendos certificados de eficiencia energética y de cumplimiento de la normativa de accesibilidad.
Con el fin de ir introduciendo la nueva normativa poco a poco, se estableció un calendario progresivo que prevé que antes del 31 de diciembre del 2017 todos los inmuebles de más de 50 años hayan pasado la pertinente inspección.
Para este primer ejercicio se decidió que tendrían que presentar el informe aquellos inmuebles construidos antes de 1943. El Concello se remitió a los datos catastrales, y el resultado fue que en Pontevedra hay un total de 292 inmuebles anteriores a esa fecha. A estos hay restar 11 edificios que fueron sometidos a restauraciones integrales con posterioridad, por lo que no tendrán que someterse a la ITV hasta que se cumplan 50 años de dichas reformas. El Concello denegó esta gracia a otros seis inmuebles por considerar que las obras efectuadas en su día no fueron una reforma integral.
En definitiva, son 281 los inmuebles cuyos propietarios tienen hasta hoy, 31 de diciembre, para presentar los correspondientes certificados. Pero no parece que la medida haya calado totalmente entre las comunidades de propietarios. A la hora de cerrar ayer el registro municipal, se habían presentado un total de 131 informes. Eso supone menos de la mitad, por lo que el director general de Urbanismo del Concello, Xosé Manuel Tato, habla de un«cumprimento moderado» de la ordenanza en su primer año de vigencia.
De todas formas, el técnico matiza que el dato no es definitivo, pues el Rexistro Municipal estará abierto hoy y aun podrían entrar certificados. De hecho, prácticamente la mitad de los 131 recibidos hasta ayer fueron presentados en el Concello en el último mes, por lo que es previsible que algunas comunidades apuren hasta el último día. Además, también se pueden presentar los informes en los registros de otras Administraciones, con lo que no llegarían al Concello durante la próxima semana.
De todas formas, ese «cumprimento moderado» no preocupa en exceso al Concello de Pontevedra, que podría iniciar expedientes sancionadores a los incumplidores, aunque no se descarta incluso prorrogar algunos meses el plazo a las comunidades de propietarios de edificios anteriores a 1943. «O noso obxectivo é que os inmobles pasen as inspeccións», apuntó Tato, por lo que no se abrirán expedientes sancionadores de inmediato, e incluso se dará cierto margen a los propietarios. El director general cree que las propias comunidades irán adaptándose porque si bien la normativa es municipal, el certificado de eficiencia energética, por ejemplo, se exige para alquilar un inmueble.
Desde el Concello de Pontevedra, además, se recuerda que este primer tramo (los edificios construidos antes de 1943) era probablemente el más conflictivo a la hora de pasar la inspección. En el 2016 tienen que presentar el informe los inmuebles anteriores a 1953; y en el 2017 será el turno de los construidos antes de 1963. A partir de ahí, los propietarios de cualquier edificio que cumpla 50 años tendrán un plazo de 5 años para presentar el correspondiente informe técnico sobre su estado.