Aunque todavía lejos de la velocidad de crucero que ya alcanza en las grandes capitales españolas y en la costa mediterránea, el mercado de la vivienda afianza su recuperación en Galicia, como muestran los datos de transacciones inmobiliarias registradas durante el primer semestre del año que ayer publicó el Ministerio de Fomento. Entre enero y junio, en la comunidad se vendieron 7.442 viviendas, un 6,6 % más que en los seis primeros meses del 2015, dato que muestra una mejoría evidente pero aún sensiblemente inferior a la detectada en el conjunto del país, donde en ese mismo período las compraventas registradas ante notario crecieron un 17,7 %, hasta las 226.751.

Una recuperación que, además, ya no se limita solo a las grandes ciudades, sino que tiñe de verde más de la mitad de los municipios gallegos. En 159 de los 314 concellos se vendieron en los primeros seis meses del año más inmuebles que en el mismo período del ejercicio anterior y, de hecho, entre ellos hay 31 que en el 2015, acabado junio, no habían conseguido despachar un solo piso o casa y que este año ya registraron alguna transacción inmobiliaria antes de empezar el verano. En otros 56, además, las ventas de vivienda crecieron más de un 100 % -es decir, más del doble-, aunque es cierto que son pequeños municipios donde el año pasado se registraron pocas operaciones, por lo que cualquier cambio dispara la estadística. Es el caso de Oia, donde las ventas aumentan un 600 % con solo siete inmuebles vendidos (frente a la única vivienda que cambió de manos en el primer semestre del año pasado). Aunque también hay casos destacados como el de Lalín, donde las 59 operaciones cerradas entre enero y junio duplican de largo las 29 del mismo período del 2015; o Noia, donde se pasa de 12 a 29.

Pese a los grandes avances que se registran en estas cabeceras de comarca, el verdadero impulso al mercado inmobiliario hay que buscarlo, de nuevo, en las principales áreas metropolitanas de la comunidad. Con la única excepción de Ferrol, donde el mercado sigue cayendo (un 3,4 %), en las otras seis grandes ciudades crecen las ventas, en todos los casos por encima de la media gallega. Repuntes que van del 8,6 % de Ourense, al 34,1 % de Pontevedra. A Coruña se mantiene como el municipio donde se registran más operaciones (992 hasta junio, un 17 % más), aunque el crecimiento es superior en Vigo, donde se vendieron 200 inmuebles más que en el primer semestre del 2015 (879 transacciones, un 29,6 % más). Que tira la demanda se nota no solo en las urbes, sino también en los concellos limítrofes comoArteixo, Teo o Nigrán.

Pero, ¿qué pasa en el resto de Galicia? En 41 ayuntamientos, el mercado está en punto muerto, no sube pero tampoco cae, frente a los descensos que se registran en otros 91 en los que sí se desploman las ventas. Entre estos destacan Foz y Narón, con bajadas del 62 y del 58 %, respectivamente, pese a las agresivas ofertas que se lanzan en la localidad mariñana. Claro que peor va la cosa en los 23 concellos en los que no se movió ni un ladrillo en seis meses. De ellos, en 9 había ocurrido lo mismo el año pasado -Cervantes,Negueira de Muñiz, Parada de Sil, Pontedeva, Porqueira, Sandiás, Xunqueira de Espadanedo, A Arnoia y Dodro (solo estos dos últimos quedaron a cero en el conjunto del 2015, ya que en los otros hubo alguna venta en el segundo semestre)- mientras que en los otros 14 empeoran los registros del año anterior.

Los expertos, cautos

Para Fernando Encinar, de Idealista, los datos muestran cierta normalización por la «mejora de la economía y la recuperación de la confianza», unida a la apertura del grifo del crédito, argumentos que comparte Beatriz Toribio, de Fotocasa, que sin embargo avanza repuntes «más suaves» en los próximos meses y recuerda que «aún se vende la tercera parte de lo que se vendía hace diez años».